Piensa, ríe, siente, llora, canta, baila,
corre, salta ... haz lo que sea o quieras, pero sobre todo, déjate llevar por
tus sentimientos y, a buen seguro, tu vida será mucho más plena y jovial.
Escondemos tanto nuestros sentimientos que,
cuando deseamos mostrarlos de nuevo, éstos ya se han escapado y no quieren
volver a salir. ¿Por qué nos cuesta tanto mostrar lo que sentimos? Puede que
sea por miedo al ridículo, por miedo al rechazo o a cualquier otro pensamiento
que tengamos en ese momento. De cualquier manera así solemos actuar y,
consecuentemente, pagamos un alto precio por ello.
Si no nos abrimos a los demás nunca sabrán
cómo nos sentimos y así difícilmente nos podrán ayudar. Muestra lo que sientas,
al fin y al cabo, nada tienes que perder y al menos te sentirás aliviado.
UN EXPRESIVO ABRAZO
No hay comentarios:
Publicar un comentario