En un mismo día podemos pasar por tantos
estados de ánimo que al hacer un recuento por la noche de nuestros actos
diarios, puede que, muchos los pasemos por alto y ¡menos mal!
Es cierto, menos mal que tenemos la
capacidad de olvidar o de no estar constantemente recordando esos malos estado
de ánimo. Querer estar siempre en un estado de ánimo óptimo es casi imposible,
pero lo que sí debemos hacer es buscar más momentos de éstos, para así
neutralizar los malos. No todas las personas actúan de la misma manera en
parecidas circunstancias y, no todos, tienen el mismo estado de ánimo; lo que
para unos es algo pasajero, para otros en una losa difícil de quitar.
Procuremos que nuestro ánimo no decaiga
mucho y, si en algún momento no podemos soportarlo, pidamos ayuda a los
profesionales, amigos o a los familiares. ¡Por favor, manifiesta tu sentir!
UN ANIMADO ABRAZO
No hay comentarios:
Publicar un comentario