No busco ni
deseo encontrarme con la tristeza, para ello busco sin cesar la alegría, porque
se que ella siempre está esperando encontrarse en buena compañia.
Es cierto que
escribir sobre la alegría es más sencillo que buscarla, encontrarla y
retenerla; no precisamos de muchos contratiempos para que la tristeza amenace
con poseernos y hacerse merecedora de nuestros pensamientos, pero sea como sea,
debemos resistirnos como si del mismo demonio se tratase y seguir con nuestra
búsqueda en pos de la alegría, si para ello debemos de cambiar de compañía,
hagámoslo, si tenemos que ir al cine, teátro o cualquier espectáculo, vayamos
allí.
No importa que
tengas que hacer pero inunda tu ser de, paz, amor yo alegría y comparte con
quien puedas, son muchas las personas necesitadas de tu alegría.
UN JOVIAL ABRAZO
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