Es curioso cómo
nos quieren enseñar a encontrarnos a nosotros mismos, a que nos conozcamos más,
cuando ya la vida se nos va acabando. Mejor sería vivir y disfrutar más del
momento, sin tanto tratar de encontrarse a uno mismo.
Quizá deberíamos
conocer más a nuestros semejantes, ocuparnos de quién es su familia, de dónde
son, de sus inquietudes; vivimos sumidos en nuestros trabajos, en nuestros
quehaceres, conocemos miles de personas por redes sociales, vivimos en bloques
de pisos llenos de personas que ni siquiera se conocen. Hagamos un pequeño
esfuerzo y empecemos a conocer mas a nuestros allegados, tiempo habrá de ir
ampliando el círculo de amistades.
Si quieres ser
conocido empieza a conocer a tu prójimo.
UN DESCONOCIDO
ABRAZO
No hay comentarios:
Publicar un comentario