Da igual la
opinión que tengas sobre cualquier tema, siempre la opinión del otro es tan
importante como la tuya y tiene su razón de ser.
No podemos ni
debemos infravalorar lo que opinan los demás por muy en desacuerdo que estemos;
seguramente, de haber nacido en donde ellos nacieron, educado en donde se
educaron y de tener su mismo entorno, nosotros también pensaríamos y
actuaríamos de la misma manera.
Agradece el
estado de gracia que vives y toda la buena educación que te han podido dar,
pero utiliza bien todo cuanto posees, porque en cuanto los demás te parezcan
que son menos importantes que tú, tu propio ego te hará perder la razón.
UN ABRAZO SIN
IMPORTAR LO QUE OPINEN LOS DEMÁS
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