No te quejes de lo que hiciste mal, eso ya no tiene solución. Alégrate por lo que hiciste bien, eso te ayudará a mejorar.
Dicen que de los fracasos se aprende, no
quito razón, pero tampoco estoy muy de acuerdo con ello. ¿No será mejor
aprender de aquello que hicimos bien y mejorarlo? Si basamos nuestro esfuerzo
en superarnos, aquello que hicimos bien nos dará más información y más saber
que lo que hicimos mal. Olvidémonos de
lo que no nos sirvió y hagamos más hincapié en
lo que de verdad es bueno y nos interesa más.
Si tú deseas seguir esforzándote por lo que
no te gusta y por lo que estuvo mal, hazlo, pero permite que los demás sigan un
mejor camino, donde la sabiduría se
impone a la torpeza.
UN BIENHECHOR ABRAZO
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