Tu verdad es tuya y de nadie
más. Sólo si la compartes, los demás podrán conocerla…
¿Te has parado a pensar a
quién le importa tu verdad? Creemos que, lo que nosotros conocemos, a otros les
puede venir bien, sin indagar en las necesidades que tengan y, suele suceder,
que les importa poco o muy poco, es más, puede que ni siquiera nos escuchen
aunque nos estén oyendo…
Lo realmente importante es
tú creencia, tu verdad es tu religión, es tu manera de vivir y compartir, es
más de lo que piensas y menos de lo que puedes otorgar; por todo ello, vive con
tu verdad, pero sin importar mucho el qué dirán y, sobre todo, haz que ésta te
colme de felicidad.
UN VERDADERO ABRAZO
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