Deberíamos estudiar la forma de estudiar,
porque la base principal está en saber hacerlo y, eso, casi nunca se enseña
bien.
Aprender a estudiar es hacer como el buen
leñador, antes de ponerse a cortar con su hacha, la afila y, después, en menos
tiempo, cortará más y con menos esfuerzo; pues así mismo ha de hacer todo buen
estudiante. Ha de preparar su mente, su escritorio, sus libros y saber cómo ha
de estudiar para aprender más y mejor.
No sólo hemos de aplicar cőmo estudiar para
aprender; también debemos usar esa misma enseñanza para todo aquello que
queramos emprender en nuestra vida. Antes de comenzar cualquier faena tenemos
que estar preparados física y mentalmente, como todo buen deportista lo está
antes de salir al campo a jugar.
UN ABRAZO NO PRECISA ESTUDIO ALGUNO
No hay comentarios:
Publicar un comentario