Eres
un genio ¡Genial, vamos allá! ¿A ver quién se lo cree? ¿Ah, que no se lo cree
nadie? No importa quién se lo crea, lo importante es que tú lo descubras y por
fin creas que lo eres.
Todos
tenemos nuestro duendecillo que es nuestro genio el cual se pone en acción
cuando menos lo esperamos y cuando más lo necesitamos; lástima que no sepamos
utilizarlo con más frecuencia y cuando lo deseamos. No somos conscientes del
poder que tenemos, sě bien de qué te hablo, porque en ocasiones suelo utilizar
este duendecillo para cosas sencillas, como encontrar estacionamiento y otros
usos, que no deseo contar.
Pero,
aparte de este duende, créeme, somos unos grandes genios, capaces de sorprender
al mundo y a nosotros mismos. Pon a funcionar tu ingenio.
UN
INGENIOSO ABRAZO
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