Hay momentos en los que pretendemos que
otros crean lo que para nosotros es una evidencia a todas luces, sin darnos
cuenta de que, nuestra verdad, no es la que ellos quieren ver ni escuchar. Da
igual cómo lo expliques, en el tono que lo digas, ni siquiera al otro le va
importar que lo documentes o lo pongas en imágenes. Cada uno ve su partido con
jugadas diferente, aunque las repitan mil veces, todo dependerá del equipo que
seas y, aun siendo del mismo equipo, también se ve diferente. Imagínate para
hacer ver a otros tu punto de vista, cuando tú ni siquiera prestas atención a
lo que el otro te dice. Lo queramos o no, todos somos parecidos y aunque nos
comportemos de diferente forma, siempre es difícil hacer que otros vean nuestra
evidencia.
UN ABRAZO, SIEMPRE ES EVIDENTE
No hay comentarios:
Publicar un comentario