Miro, observo y me deleito con lo que veo; pero ¿realmente, cuánto tiempo nos pasamos, mirando, observando y deleitándonos?
Pasamos por la vida, la mayoría de nuestro tiempo, sin ver, sin
escuchar, sin sentir, sin pena ni gloria; totalmente al margen de lo que
realmente es vivir. ¿Por qué?¿ Si pasamos inadvertidos de lo que
verdaderamente nos da el sentirnos plenos de amor hacia todo lo que
percibimos, que nos queda?
Aflojemos un poco nuestra marcha hacia
ninguna parte; disfrutemos más instantes de nuestro ser y de la compañía
de los demás, hagamos locuras nuevas y gocemos de nuestros sentimientos
y ¡así, sí valdrá la pena vivir !
UN ABRAZO, DEJÁNDONOS LLEVAR DE NUESTRO SENTIR
No hay comentarios:
Publicar un comentario