Que tu preocupación no sea el tiempo vivido
si no lo que no te atreviste a vivir. Aún estás a tiempo de atreverte, no lo
pienses más.
Haz aquello que nunca te atreviste, no
importa lo que sea; pequeñas acciones pueden acabar en grandes momentos. No
todas las personas vamos a actuar del mismo modo, pero sí que podemos
atrevernos a hacer mucho más de lo que hasta ahora nos hemos atrevido y, de
esta manera, no tendremos que lamentarnos, más tarde de lo que pudimos haber
hecho.
Nunca es demasiado tarde para comenzar algo
nuevo, solamente tienes que atreverte, si lo crees necesario, empieza dando el
primer paso.
UN ATREVIDO ABRAZO
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