El
mundo no tiene fronteras, si esto es así ¿por qué nos ponemos tantos límites
las personas? No hay manera de romper barreras, estamos tan atrapados con
nuestras obligaciones que ya casi nos resulta imposible dar un paso distinto.
Muchos
lo intentan, incluso ponen esfuerzo y trabajo, pero en cuanto llegan los
contratiempos, se van quedando atrás; una lástima, porque de seguir hacia
adelante casi seguro llegarían. Quizá la cuestión no sea en salirse de lo
establecido ni querer ser más de lo que cada uno es, puede, que con disfrutar
del camino, de la compañía, familia, amigos compañeros, etc, sea suficiente
para vivir.
Quizás
a la gran mayoría nos valga con agradecer cuanto poseemos y sobre todo
querernos, aquí puede estar la plenitud de nuestros días.
UN
ABRAZO SE PUEDE DAR A CUALQUIERA
No hay comentarios:
Publicar un comentario