Es como la sombra, mientras no se apague la luz enfrente de nosotros, siempre la tendremos detrás. Si nos ha de acompañar, procuremos nos dé la mejor sombra posible...
El tiempo pasa demasiado deprisa para perderlo en lamentos y quejas, que por otro lado, a casi nadie les importa. Ni importa lo que nos duella ni dónde; ni siquiera tu médico habitual, éste te ausculta, te receta y que pase el próximo, somos u...no más en su lista…
Lo que siempre nos va a acompañar es nuestra propia vida y la de las personas más queridas por nuestra parte y la de ellos, agradezcamos a toda su compañía y especialmente a aquellos que tanto nos ayudan y nos quieren…
ABRACEMOS LA VIDA
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