Tú tienes tu propia paz, no la busques en los demás.
No busques La Paz mundial, porque no la hallarás, esto solo te privará de tu propia paz.
Podemos alejarnos del ruido de la ciudad, de las personas, de las
multitudes; podemos irnos a sitios solitarios, a la montaña, a la playa a
donde quiera que estemos solos, pero nuestra propia paz no la vamos
hallar ahí. Realmente encontraremos la ansiada paz cuando oigamos el
latir de nuestro corazón a pesar de estar rodeados de un gran ruido, entonces nos daremos cuenta que la hemos encontrado.
Que no haya nada ni nadie que te prive de tu propia paz.
UN ABRAZO CON TOTAL TRANQUILIDAD
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