Muchas veces creemos que podemos elegir nuestro
pensamiento y nada más lejos de la realidad. Las circunstancias de cada
uno son las que dirigen su pensamiento.
Es verdad es que, si
cambias tus pensamientos, éstos pueden alterar tus circunstancias, pero
para ello tienes que tener bastante fuerza de voluntad, porque de lo
contrario las circunstancias serán la que dominen tu pensar.
Ya lo
sabes, ejercita tu mente, pero sin fatiga, sin darle tiempo a que vea la
realidad. Si eres capaz de dominar tu mente, tendrás el mundo a tus
pies, podrás controlar cualquier situación. No lo dudes, en cuanto te
entren dudas, tendrás que volver a comenzar.
UN DOMINADOR ABRAZO
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